Tabla de Contenidos
- 1 Apertura de la Sesión de la Representante Ana Paulina Luna, Presidenta del Grupo de Trabajo
- 1.1 Declarantes en la Audiencia UAP 2025
- 1.2 Resumen de la Audiencia: Una Verdad Oculta a Plena Vista
- 1.3 El Miedo al Estigma y la Urgencia de un Sistema de Reporte
- 1.4 El Desafío a la Burocracia y la Oficina de Resolución de Anomalías
- 1.5 Presentación de evidencias en el Registro del Congreso
- 1.6 Hacia una Nueva Era de Transparencia: ¿Qué Sigue?
- 1.7 Conclusión: Un Cambio de Paradigma en el Horizonte
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El Congreso Exige Respuestas
En una sesión que quedará marcada en los anales de la investigación de los Fenómenos Anómalos No Identificados (UAP, por sus siglas en inglés, anteriormente conocidos como OVNIs), el Congreso de los Estados Unidos se convirtió este martes 9 de septiembre de 2025 en el escenario de un intenso debate sobre el secreto gubernamental, la seguridad nacional y la necesidad imperiosa de transparencia. La audiencia, titulada «Restaurando la Confianza Pública a través de la Transparencia y la Protección de Denunciantes de UAP«, congregó a veteranos de las Fuerzas Aéreas, testigos directos y periodistas de investigación, quienes pintaron un cuadro de décadas de secretismo oficial y represalias contra aquellos que se atrevieron a hablar.
La sesión, convocada por la Subcomisión de Seguridad Nacional, Frontera y Asuntos Exteriores del Comité de Supervisión de la Cámara de Representantes, estuvo cargada de testimonios contundentes y una frustración palpable por parte de los legisladores ante lo que describen como una ofuscación sistemática por parte del Pentágono y las agencias de inteligencia.
Apertura de la Sesión de la Representante Ana Paulina Luna, Presidenta del Grupo de Trabajo

La congresista Ana Paulina Luna comienza su discurso afirmando que el tema de los Fenómenos Anómalos No Identificados (FANI) no es ciencia ficción, sino una cuestión de seguridad nacional, responsabilidad del gobierno y derecho a la verdad del pueblo estadounidense.
Puntos clave:
- Testigos silenciados: Luna destaca la preocupante situación de los pilotos y militares que se niegan a hablar públicamente por miedo a perder sus carreras. Subraya que silenciar a los observadores más capacitados pone en riesgo la seguridad nacional.
- Críticas a la AARO: La congresista critica duramente a la Oficina de Resolución de Anomalías de Todos los Dominios (AARO), acusándola de ser un «cementerio de testimonios» que ignora y desacredita los informes en lugar de investigarlos. Menciona que el exdirector de AARO, Sean Kirpatrick, ha atacado a los denunciantes y a los miembros del comité, y cita al exsubsecretario adjunto de Defensa, Chris Mellon, quien calificó un informe de AARO como «el más erróneo e insatisfactorio» que había leído, por omitir agencias y datos relevantes.
- Evidencia de tecnología desconocida: Luna afirma que el Congreso ha recibido pruebas de «tecnologías que, hasta donde sabemos, están más allá de nuestras capacidades actuales». Destaca la importancia de investigar estos fenómenos, ya sean de origen adversario, natural o desconocido.
- Barreras burocráticas: La congresista señala la falta de cooperación del Departamento de Defensa (DoD) y la Comunidad de Inteligencia (CI) como un obstáculo importante. Explica que las reglas de los programas de acceso especial (SAP) restringen el acceso del Congreso a documentos y videos, lo que dificulta la supervisión independiente.
- Llamado a la acción: En su cierre, Luna hace un fuerte llamado a la transparencia y la rendición de cuentas. Argumenta que el pueblo estadounidense es lo suficientemente maduro para manejar la verdad y no perdonará a un gobierno que la oculte. Finaliza citando a varios funcionarios de alto rango, como los senadores Schumer, Rounds y Rubio, que han reconocido la credibilidad de los testigos y la seriedad del asunto. Luna insiste en que el gobierno debe ser transparente y que ha llegado el momento de revelar las verdades sobre los FANI.
Declarantes en la Audiencia UAP 2025

Jeffrey Nuccetelli
Veterano de la Fuerza Áerea
Jeffrey Nuccetelli, exoficial de la policía militar de la Fuerza Aérea de EE. UU., testifica sobre una serie de incursiones de Fenómenos Aéreos No Identificados (FANI) ocurridas en la Base de la Fuerza Aérea de Vandenberg entre 2003 y 2005. Según su testimonio, estos incidentes fueron presenciados por múltiples personas, documentados e investigados por la cadena de mando. Sin embargo, no se recibió ninguna guía ni explicación por parte de los mandos superiores. Nuccetelli relata varios incidentes específicos, incluyendo el conocido como el «Cuadrado Rojo de Vandenberg» , un objeto rectangular «más grande que un campo de fútbol» y un encuentro personal con un objeto luminoso.
Nuccetelli enfatiza que el problema no es si estos eventos son reales, sino si tenemos el coraje de enfrentarlos. Por ello, pide al Congreso que tome medidas para abordar este tema con seriedad:
- Financiar la investigación independiente de los FANI.
- Poner fin al secretismo y la sobreclasificación de la información.
- Proteger a los testigos para animar a otros a presentarse.
Finaliza su declaración afirmando que explorar estos fenómenos podría «desbloquear avances transformadores en tecnología, biología y el entendimiento humano

Jefe Alexandro Wiggins
Oficial de la Marina, especialista en Radar
La declaración es un testimonio personal de un Suboficial Mayor de la Marina, que describe un incidente ocurrido el 15 de febrero de 2023 a bordo del USS Jackson. El incidente tuvo lugar frente a la costa del Sur de California, en un área conocida por avistamientos regulares de objetos no identificados.
El Suboficial Mayor presenció cómo un objeto con forma de «Tic-Tac» emergía del océano para unirse a otros tres objetos similares. Estos cuatro objetos partieron de manera sincronizada y casi instantánea, sin generar estampidos sónicos ni las firmas de propulsión de aeronaves convencionales.
El evento fue captado por múltiples sensores del barco, incluyendo el radar y el sistema EO/IR
Star SAFIRE, y fue grabado en video. El testimonio subraya la necesidad de abordar estos fenómenos de manera sistemática y sin estigmas, y el Suboficial Mayor hizo pública su experiencia para garantizar un registro de primera mano y alentar a otros a hablar. Su declaración concluye pidiendo una mejora en la seguridad, la precisión de los informes y el rigor analítico con respecto a losFenómenos Anómalos No Identificados en las zonas de operaciones de EE. UU. A continuación el video que fue mostrado en el Congreso y que se corresponde con el objeto declarado por el Jefe Wiggins.

George Knapp
Periodista especializado.
La declaración de George Knapp, periodista de investigación, se centra en su larga trayectoria cubriendo el fenómeno OVNI y en la creencia de que existe un encubrimiento por parte del gobierno.
Knapp afirma que no se trata de una cuestión de «creencia», sino de una historia periodística basada en un «rastro de papel» de documentos gubernamentales que contradicen la narrativa pública. Señala que la información desclasificada a través de la Ley de Libertad de Información (FOIA) muestra que las agencias de inteligencia han mentido al público y al Congreso sobre la realidad y las capacidades de los FANI.
El periodista detalla su investigación sobre programas de ingeniería inversa de tecnología no terrestre, mencionando fuentes de alto nivel como el exsenador Harry Reid y el Dr. James Lacatski. Además, revela la existencia de amenazas a testigos que intentaron hablar.
Finalmente, Knapp presenta evidencia de que Rusia ha tenido programas de investigación de ovnis durante décadas, incluyendo incidentes en los que aviones de combate rusos cayeron tras enfrentarse a FANI. Concluye que tanto el gobierno estadounidense como el ruso han mentido a sus ciudadanos sobre este tema, mientras compiten en secreto para replicar la tecnología.

Dylan Borland
Veterano de la Fuerza Aérea, Testigo UAP:
La declaración de Dylan Borland es un testimonio de un exoficial de la Fuerza Aérea de EE. UU. y analista de inteligencia. En ella, revela su conocimiento directo de programas clasificados que manejan tecnologías de origen desconocido (OVNI/FANI). Su motivación para convertirse en denunciante fue la preocupación por la seguridad de las personas y la necesidad de informar a los representantes electos sobre la verdad oculta.
Borland relata un encuentro personal con un objeto triangular de 100 pies de largo que voló sobre la Base de la Fuerza Aérea de Langley. La nave no emitía sonido, interfería con las comunicaciones y ascendió a una velocidad asombrosa sin perturbaciones cinéticas.
A lo largo de su carrera, y después de su testimonio, enfrentó un patrón de represalias sistemáticas, incluyendo:
- Obstrucción profesional y listas negras.
- Manipulación de sus registros de seguridad.
- Acoso laboral.
- Negación de su trabajo previo.
- Intentos de ataques de phishing para averiguar lo que había divulgado.
A pesar de haber testificado ante el Inspector General de la Comunidad de Inteligencia (ICIG), percibe que el objetivo era simplemente evaluar su conocimiento, no iniciar una investigación. Concluye haciendo un llamado al Congreso para que actúe, enfatizando que la verdad y la transparencia son esenciales para el funcionamiento de la república democrática. Para Borland, el futuro de la humanidad depende de si se aprovecha esta tecnología para avanzar o si se permite que nos haga retroceder.
Resumen de la Audiencia: Una Verdad Oculta a Plena Vista
«El público ha sido informado una y otra vez desde finales de los años 40 que no hay nada de qué preocuparse«, declaró en su intervención inicial el veterano periodista de investigación George Knapp, una de las voces más respetadas en el estudio de los UAP. Knapp, conocido por su trabajo pionero al destapar la historia del Área 51, argumentó que los documentos oficiales internos cuentan una historia radicalmente diferente a la narrativa pública. «Estos misteriosos artefactos vistos por millones de personas […] ‘no son reales, no son una amenaza’. Los documentos pintan un cuadro muy distinto», afirmó, estableciendo el tono de una audiencia que buscaba desmantelar un muro de silencio construido durante más de 75 años.
Junto a él, testificaron figuras que han experimentado de primera mano las consecuencias de este secretismo. Los veteranos de la Fuerza Aérea de los EE. UU. Jeffrey Nuccetelli y Dylan Borland ofrecieron relatos escalofriantes no solo sobre sus encuentros, sino sobre el estigma y el miedo a las represalias que impiden que muchos otros pilotos y personal militar informen sobre lo que ven en los cielos.
«La transparencia es el fundamento de la verdad. Sin ella, testigos como nosotros son desestimados«, afirmó Nuccetelli. «Protejan a los testigos. Muchos permanecen en silencio por temor a sus carreras, su reputación y la seguridad de sus familias». Borland se hizo eco de este sentimiento, describiendo cómo numerosos patriotas que han intentado revelar la «realidad UAP» se sienten «descartados, aislados, sin esperanza, separados del país al que sirven».
El Miedo al Estigma y la Urgencia de un Sistema de Reporte
Uno de los puntos centrales de la audiencia fue el testimonio del Jefe Alexandro Wiggins, quien subrayó la necesidad crítica de un sistema de reporte estandarizado y libre de prejuicios. «Reportar sin estigma, protección sin retribución. Los marineros necesitan saber que informar sobre encuentros con UAP no dañará sus carreras», demandó Wiggins.
Los miembros del Congreso presentes, incluyendo a la presidenta del Grupo de Trabajo, Anna Paulina Luna (R-Fla.), y representantes como Tim Burchett (R-Tenn.) y Eric Burlison (R-Mo.), expresaron su firme apoyo a esta idea. Se discutió la necesidad de crear un protocolo claro y centralizado que no solo proteja a los denunciantes, sino que también garantice la recopilación de datos de alta calidad. Wiggins sugirió «una lista de verificación y entrenamiento estandarizados para asegurar que capturemos los mejores datos de sensores posibles en tiempo real«, un enfoque científico para un problema a menudo relegado al ámbito de la especulación.
El Desafío a la Burocracia y la Oficina de Resolución de Anomalías
Gran parte de la crítica se centró en la Oficina de Resolución de Anomalías en Todos los Dominios (AARO, por sus siglas en inglés), la entidad creada por el Congreso precisamente para investigar estos fenómenos. Sin embargo, según los testimonios y las declaraciones de los congresistas, la AARO y el Departamento de Defensa (DoD) han sido más un obstáculo que una ayuda.
La presidenta Luna fue especialmente contundente en su declaración de apertura: «Una barrera importante para la investigación del Comité sobre los UAP ha sido la falta de cooperación y transparencia del DoD y la Comunidad de Inteligencia». Se mencionó la frustración por las repetidas negativas a las solicitudes del Comité para ver videos y archivos relacionados con incidentes UAP, alimentando la percepción de un encubrimiento activo.
Se criticó duramente un informe reciente de la AARO que concluía «ninguna evidencia» de tecnología extraterrestre, un hallazgo que testigos como Chris Mellon, ex Subsecretario Adjunto de Defensa para Inteligencia, calificaron como un fallo en el cumplimiento de su mandato congresual, omitiendo agencias y programas relevantes.
Presentación de evidencias en el Registro del Congreso
Para que constara, se presentaron varias evidencias de importancia en el registro del congreso. El congresista Eric Burlison presentó en la Audiencia un video que le havía sido entregado. El video muestra una imagen militar tomada desde un dron que está monitorizando el vueo de un orbe no identificado. De repente el orbe es impactado por un misil Hellfire disparado por otro dron de combate. El orbe no detiene su vuelo y los fragmentos desprendidos parecen acompañar en el vuelo al orbe principal. Segñun la información suministrada por Burlison, el video fue tomado en Oriente Medio. El video en concreto es este:
El periodista George Knapp por su parte presentó en registro un voluminoso documento denominado Amenaza 3. Según Knapp fue obtenido por el durante un viaje a Rusia, donde pudo sacarlo a escondidas eliminando las portadas que mencionaban que era un documento alto secreto. Según ha declarado el peridoista, el documentofue analizado por un agente de la DIA, el Dr. James Lacatsky, empleandose ademas recursos de Bigelow Aerospace para certificar su autenticidad. El documento habla, según Knapp, sobre las operaciones en la Unión Sovietíca en relación al fenómeno OVNI.
Hacia una Nueva Era de Transparencia: ¿Qué Sigue?
La audiencia no solo sirvió para ventilar frustraciones, sino también para plantear un camino a seguir. La principal demanda es clara: transparencia. Los legisladores exploraron activamente cómo fortalecer las protecciones para los denunciantes. El representante Burchett inquirió directamente sobre qué puede hacer el Congreso para mejorar estas salvaguardas, una pregunta que resuena con la propuesta de la «Ley de Protección de Denunciantes de UAP«.
La idea de que los contratistas privados de defensa puedan estar en posesión de tecnología de origen no humano, financiada indirectamente por los contribuyentes pero oculta al escrutinio del Congreso, fue otro de los temas candentes. Se planteó la posibilidad de utilizar el poder de citación del Congreso para obligar a estas corporaciones a revelar lo que saben.
Conclusión: Un Cambio de Paradigma en el Horizonte
La audiencia del 9 de septiembre de 2025 no ha revelado un «extraterrestre carbonizado en una losa», como bromeó George Knapp, pero sí ha puesto de manifiesto algo quizás más tangible y preocupante: un gobierno que, según los testigos y legisladores, ha fallado sistemáticamente en su deber de ser transparente con el pueblo estadounidense sobre un fenómeno que tiene implicaciones directas para la seguridad nacional y, potencialmente, para el lugar de la humanidad en el cosmos.
Ya no se trata de si los UAP son reales; los datos de radar, los testimonios de pilotos de combate y las imágenes desclasificadas han zanjado esa cuestión. La pregunta ahora es qué son y quién sabe la verdad. La sesión de hoy ha dejado claro que una parte influyente del Congreso no está dispuesta a aceptar más evasivas. La demanda de respuestas es más fuerte que nunca, y con ella, la esperanza de que, finalmente, la verdad sobre lo que ocurre en nuestros cielos salga de las sombras. El «gran silencio» podría estar llegando a su fin, no por una transmisión desde las estrellas, sino por la insistencia de unos pocos representantes y valientes testigos aquí en la Tierra.